domingo, 21 de enero de 2007

La huella más ligera


La huella más ligera


Muchas veces nos preguntamos de que forma pudimos encontrar esa persona tan especial que tenemos a nuestro lado. ¿Cómo fue, que entre tantas, conociéramos una tan única por la que en estos momentos daríamos la mitad de la vida?; solo la mitad, porque el resto lo reservaríamos para estar junto a ella. Existen tantos seres humanos como hojas deja caer el bosque durante un otoño gris; entre tantos, se hace muy difícil encontrar alguien lo suficientemente compatible con nosotros como para decidirnos a atar nuestra vida. Es casi imposible pararse bajo un árbol y atrapar la hoja que se desprende de una rama; sin embargo, el día menos pensado, cuando pasamos bajo un arbusto, éste deposita una de sus pequeñas hijas verdes en nuestras manos.
Algunas veces sentimos que conocemos una persona hace mucho tiempo aunque solo hayamos intercambiado breves palabras, es allí donde comienza a ayudarnos esa extraña fuerza que nos guía siempre, que aunque no nos demos cuenta, se nos adelanta una pisada dejando su rastro para que lo sigamos.
Jamás cierres los ojos ante esas señales que son puestas en tu camino, porque hacerlo, significa perder esa delgada línea que debemos seguir para encontrar el amor; toda búsqueda humana, aunque muchos intenten ocultarlo, está encaminada al amor.
Al torcer ese sendero que las señales nos han dibujado, el destino nos castiga. Encontramos alguien que parece ideal, podemos llegar a compartir varios años con esa persona, y cuando pensamos que no nos falta nada, nuestra vida se derrumba como el mayor castillo de naipes; entonces, sin saber por qué, viene a nuestra mente el recuerdo de aquella muchacha que nos regaló una tierna sonrisa o la que simplemente nos detuvimos a mirar mientras leía un libro en la biblioteca, quizá allí perdimos la huella del destino y tomamos un camino equivocado.
Camina siempre tras esa ligera huella que se dibuja un paso ante ti. Escucha el silencio, en el encontrarás los mensajes que no se perciben en la mayor de las algarabías. No cambies amor por comodidad y no temas a los cambios, porque estos no se nos presentan para confundirnos sino para ayudarnos. Y sobre todas las cosas, nunca renuncies a tus sueños por ilógicos e inseguros que parezcan, ten presente que un sueño por el que no luchas, te persigue durante toda la vida.

4 comentarios:

martha dijo...

hola Maikel.
sabes esta muy bonito este tu nuevo texto, dice toda la verdad y como tu opino lo mismo, cuando uno encuentra esa persona especial no debemos dejarla ir. y debemos seguir por ese camino.
T. Q. M. Martha.

Anabel dijo...

"...ten presente que un sueño por el que no luchas, te persigue durante toda la vida." Tal vez éste sea el objetivo de nuestra existencia: realizar nuestros sueñor.
Muy lindo.

Nos leemos,

Anabel

Maikel Riggs dijo...

Martha, gracias por tu comentario, me alegra que te haya gustado, un saludo
Maikel Riggs

Maikel Riggs dijo...

Anabel, estoy muy complacido porque te haya gustado, otro beso
Maikel Riggs